Observador veracruzano
A través de su cuenta de facebook, Citlali Jácome narró el infierno que vivió el pasado 28 de marzo cuando, al viajar en un tranvía turístico que salió del Acuario de Veracruz, un cable le pegó a su esposo y se le enredó en el cuello a su hijo. Este suceso pudo haber terminado en una tragedia, el niño pudo haber muerto, pero por fortuna él y su familia viven para contar esta amarga experiencia.
A continuación transcribimos textualmente el relato de Citlali Jácome, mismo que escribió en su facebook y fue compartido por amigos y familiares quienes se solidarizaron con su pena. Lo peor del caso es que ninguna autoridad respondió por este suceso. Citlali tituló a su texto que más bien es una queja como “El tranvía del terror en Veracruz”.
“El 28 de marzo de 2018 aproximadamente como a las 7:10pm tomamos un tranvía turístico frente al acuario, nos sentamos en la parte alta mi hijo, esposo y yo. Por la náutica tomó una desviación porque están reparando el boulevard y pues solo escuchamos gritos y manotazos, eran cables, un cable pegó a la gente del frente, pero como ya era de noche no se podían ver con claridad y como la de malas a mi marido le pegó y a mi hijo se le enredó en el cuello y como el tranvía seguía avanzando mi hijo se fue ahorcando y en nuestra desesperación lo agarramos y su cabeza se fue hacia atrás y eso ayudó que el cable por fuerza saliera del cuello pero le dejó cortado, todos gritaron que se detuviera pero no pasó así, mi esposo bajó pero la escalera de la planta alta da al piso y no podía bajarse, sin embargo logró comunicarse y detuvieron el tranvía. No nos brindaron auxilio, así que de inmediato nos fuimos a la beneficencia española donde examinaron a mi hijo y el día de ayer un traumatólogo lo examinó, le volvieron a realizar radiografías y para descartar una tomografía. Mi hijo gracias a Dios sigue vivo porque los médicos aseguran que pudo haber muerto y sólo cuenta con una laceración en el cuello y un esguince de 3er. grado. Pido a las autoridades que tomen cartas sobre el asunto o esperarán a que un turista muera y que la empresa se haga responsable del daño físico y psicológico que nos dejó su imprudencia e irregularidad”, finalizó Citlali Jácome.