Por: Leopoldo Tlaxalo Jaramillo
El próximo 1 de noviembre Miguel Ángel Yunes Linares cumplirá 11 meses de gobierno y desafortunadamente para él, pero sobre todo para los veracruzanos no ha podido erradicar,o solucionar al menos, el problema de la inseguridad. Ha sido su talón de Aquiles porque al llegar al gobierno se dio cuenta que no era tan fácil como él pensaba. Para Miguel Ángel era fácil criticar la administracón duartista que tenía, también, problemas de inseguridad, los cuales Duarte nunca tuvo la voluntad de solucionar porque no sabía como, pero Yunes Linares se vendió ante los electores como un experto en el tema. Y decepcionó a varios que votaron por él con la esperanza de que disminuyeran los robos, asaltos, secuestros, homicidios y otros delitos. La gente le compró su discurso de que podía solucionar el problema de inseguridad en seis meses….tristemente ya van casi 11 meses de que empezó su administración y la crisis de violencia en la entidad veracruzana en lugar de mejorar, empeoró.
Después de dos administraciones desastrosas en las que reinó la inseguridad, corrupción, impunidad, violencia y el desvío de recursos en su máxima expresión, se sabía que no sería fácil que Miguel Ángel Yunes Linares acabara con estos vicios de la noche a la mañana. Hay que reconocer que Yunes ha puesto su mayor esfuerzo para solucionar los problemas que aquejan a Veracruz, pero su esfuerzo no ha rendido frutos, han sido en vano porque aunque el gobernador sea buen funcionario y una persona bien intencionada, su equipo de trabajo no lo ayuda, le hacen un flaco favor y lo perjudican pues la mayoría de ellos no están capacitados para asumir el cargo. Les falta conocimientos y experiencia en el área en la que se desempeñan, pero sobre todo humildad. Los subordinados de Yunes han sido descalificados ante la opinión pública y considerados tan nefastos como los funcionarios de la administración duartista. Pero no todo está perdido, todavía estamos a tiempo de que Yunes reaccione y haga los cambios necesarios para que se sacuda esos malos elementos que son un cáncer para su gobierno y que están obstaculizando el progreso y desarrollo de Veracruz en diversos rubros.
Los errores del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares están a la vista de todos los veracruzanos. Y cada quien reacciona, frente a estos errores, según sea la simpatía, antipatia o indiferencia que sientan por él. Sus detractores maximizan sus desaciertos, la gente cercana a MAYL ni siquiera le hace ver que está obrando mal porque temen que pueda enfurecerse ante un comentario que no sea halagador, pero los que simpatizan con él, lo aprecian o simplemente aman a Veracruz le hacen ver sus errores y pifias cometidas para que enmiende el camino y enderece el rumbo hacia un mejor Veracruz. Hay gente bien intencionada que lo critica y opina en las redes sociales sobre su desempeño administrativo. Los comentarios son buenos y le servirían para crecer y hacer verdaderos cambios, pero las críticas, que son muy duras, son tomadas por gente cercana a Yunes, como estar en contra de su administración. Nada más alejado de la realidad, precisamente porque uno ama a Veracruz quiere que el gobernador haga las cosas bien.
La administración yunista es vista de distintas maneras por diversos actores políticos. Hay unos que la ven con buenos ojos, otros que prefieren no opinar para no contrariar a Yunes o meterse en problemas con él, pero un buen número de actores políticos opinan negativamente de la actual administración. Claro, la mayoría de ellos son priistas, morenistas o ex panistas que ahora se venden como independientes. A ellos les viene como anillo al dedo cada uno de los errores de Yunes pues les beneficia en su proyecto político. Hacen leña del árbol caído dirían algunos. Aparte, hablar mal de Yunes les sirve a algunos para mantenerse vigentes en el colectivo social y la opinión pública porque inmediatamente los demás voltean a ver a esos actores politicos que se atreven a desafiar al gobernador.
Héctor Yunes Landa no pierde la oportunidad para despotricar en contra de la administración de su primo, al cual le tiene coraje y envidia porque le ganó la gubernatura, pero hay que reconocer que los comentarios vertidos por Héctor son certeros algunas ocasiones, otras veces se nota la cizaña y mala voluntad que le tiene a su primo. Miguel Ángel Yunes Linares debería de escucharlo o leerlo porque sus opiniones le pueden servir para corregir el rumbo de un buen gobierno, si es que quiere que sus descendientes sigan perpetuándose en el poder. Héctor dijo que el mal trabajo realizado por Yunes Linares no beneficia en nada al proyecto político que tiene Miguel Ángel de que su hijo lo releve en el cargo en 2018. En parte Héctor tiene razón, Miguel Ángel debe preocuparse por hacer un buen trabajo que deje satisfechos a los veracruzanos, de lo contrario la gente no se verá tentada a votar por Miguel Ángel Yunes Márquez al considerar que su hijo podría representar lo mismo que su padre: la desilusión y el engaño.
Yunes Landa también dijo que Yunes Márquez tiene actos anticipados de campaña en varios municipios de la entidad veracruzana, acción que le ha provocado denuncias y apercibimientos de las autoridades electorales. Esta situación beneficia a los priistas pues ya son muchas voces las que acusan a MAYM de actos anticipados de campaña. Los priistas le apuestan a que ante tantas denuncias y apercibimentos se le termine cayendo la candidatura al alcalde de Boca del Río, pero para desgracia de los priistas no será así. Su candidatura sigue en pie. Héctor dice que nada justifica el que el alcalde acompañe a su padre, el gobernador de Veracruz, en sus giras por municipios del Estado de Veracruz pues a todas luces se ve que los eventos son para promocionar a su hijo rumbo a la gubernatura de Veracruz. Aparte los foros que tiene Yunes Márquez donde visita diversos municipios para enseñarle a los alcaldes como tener un municipio exitoso también son actos anticipados de campaña pues pide el voto a favor suyo para que continúe el cambio, señaló Héctor.
El senador acusó al gobernador de querer imponer a su hijo como candidato a la gubernatura en el PAN. Dijo que a diferencia de Miguel Ángel, en el PRI no impondrán al candidato a la gubernatura pues se buscará el mejor método para determinar quien será el candidato del PRI, el cual debe garantizar el triunfo porque el propósito es recuperar la gubernatura. Se buscará que el candidato priista realmente tenga posibilidades de triunfo. Héctor se muere de ganas de volver a ser el candidato a la gubernatura de Veracruz, pero dicen las malas lenguas que no será él el bueno. Y posiblemente ni siquiera José Yunes Zorrilla. Puede haber un tapado cuyo nombre podría ser revelado en unas semanas. Eso si, Héctor dijo que en caso de volver a ser el candidato no prometerá cosas que no pueda cumplir para que no le pase lo mismo que a su primo Miguel Ángel con el tema de la inseguridad.
Otro que ataca la administración yunista es el ex panista Juan Bueno Torio, quien aseguró que el gobierno que encabeza Yunes Linares es insensible, no atiende las necesidades de la población ni tampoco ha dado resultados en casi 11 meses. Lo que más criticó el ex candidato independiente a la gubernatura de Veracruz es que cuando la gente se manifiesta por falta de servicios públicos, temas relacionados con la salud o educación, o ausencia de justicia, son reprimidos con golpes y garrotazos por parte de la policía estatal. Bueno Torio considera que la llegada de Yunes Linares al gobierno de Veracruz no representó un cambio positivo para los veracruzanos, pues estamos peor en materia de inseguridad, empleos, inversiones, desarrollo humano y social que en la época de Duarte. Bueno Torio añadió que Yunes no puede colgarse la medalla de que él metió a la cárcel a Duarte, porque lo encarceló el gobierno federal. Dijo que debe aplicar la justicia a todos los cómplices de Duarte y no entablar lazos de complicidad con duartistas que ahora despachan como diputados locales.
A las críticas en contra de Yunes Linares se unió el senador José Francisco Yunes Zorrilla, quien aspira a ser candidato a la gubernatura de Veracruz del PRI en 2018, y por eso golpea mediáticamente a los dos Yunes, tanto al padre como al hijo. Al padre porque es el gobernador y tiene que hacerle creer a la opinión pública que sería mejor si estuviéramos gobernados por un priista. Y al hijo lo golpea mediáticamente porque considera que Miguel Ángel Yunes Márquez será su contrincante en la elección de 2018, pero de buena fuente nos informaron que la candidatura de Yunes Zorrilla pende de un hilo y se podría venir abajo en cualquier momento, pues él no representaría el triunfo para el PRI, y no les queda otra opción: o ganan o ganan.