Leopoldo Tlaxalo
La diputada federal del Partido Acción Nacional, Gabriela Ramírez Ramos presentó una reforma al artículo 3 de la Ley Federal de Trabajo para combatir la discriminación, una practica cotidiana que desafortunadamente no se ha logrado erradicar. “La discriminación consiste en dar un trato desfavorable o desprecio inmerecido a determinada persona o grupo. Son muchos los grupos humanos que son víctimas de la discriminación todos los días ya sea por alguna de sus características físicas, formas de vida u otras diferencias que puede ser motivo de distinción, exclusión o restricción de derechos”, expresó la legisladora.
Los que más sufren discriminación son los adultos mayores. “La carta de San José sobre los derechos de los adultos mayores en América Latina y el Caribe realizada en 2012 hace énfasis en no escatimar esfuerzos para proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales de los adultos mayores. Erradicar todas las formas de discriminación y violencia y crear redes de protección de los adultos mayores para hacer efectivos sus derechos para mejorar su calidad de vida y no verse vulnerables ante cualquier situación de discriminación o maltrato”, añadió Ramírez Ramos.
Otro tema que abordó la diputada del PAN es que los adultos mayores son discriminados por los empresarios al momento de solicitar un empleo pues consideran que su presencia en el área laboral sólo será una carga para la empresa, cuando por el hecho de ser adulto mayor los dota de experiencia en diversos rubros. La discriminación no sólo la padecen los adultos mayores, también las personas que tienen más de 35 años, que están en la plenitud de su vida y que ya no son consideradas por los empresarios para darles un trabajo.
De acuerdo a datos del INEGI, 4. 8 millones de personas, es decir, el 49% laboran por cuenta propia y el 4.4% por ciento de la población no recibe remuneración alguna por su trabajo. El 60.8% no tiene acceso a servicio de salud por su trabajo. El 61.8% labora sin tener un trabajo y casi la mitad no cuenta con prestaciones. El 73.2% trabaja de manera informal. La experiencia de los adultos mayores no es valorada en las empresas. “Los adultos mayores representan una riqueza para la sociedad y contribuyen de manera significativa al desarrollo del país, digamos no rotundo a la discriminación”, finalizó Ramírez Ramos.