Observador veracruzano
La periodista Claudia Guerrero Martínez publicó en su portal de internet la exclusiva de que en una reunión entre líderes del PRI Nacional y miembros del gabinete de Peña Nieto, entre otros actores políticos, se llegó a la conclusión de que la mejor opción para evitar que el PRI pierda la gubernatura por la mala imagen del gobernador de Veracruz, es que éste pida licencia y se separe de su cargo.
Esta noticia es verídica y no se trata de un cuento chino como quieren hacer creer ciertos actores políticos, entre ellos el propio gobernador Javier Duarte de Ochoa, quien se burló a través del twitter y negó que le hayan pedido que deje el cargo. Javier posteó en su red social: “Ayer lo de la parroquia, hoy lo de la licencia, a ver que inventan mañana #tiemposelectorales”.
En realidad, Duarte sabe que se tiene que ir por el bien de su partido, de lo contrario el PRI corre el riesgo de perder la gubernatura por primera vez en la historia de Veracruz. Aparte de que teniendo como gobernador a Duarte y disponiendo de los recursos económicos, también se corre el riesgo de que éste trabaje en contra de su propio partido y a favor de cualquier candidato que le garantice impunidad y que sea fácil de manipular.
Las estrategias de Duarte para restarle votos al candidato a la gubernatura de Veracruz de la alianza PAN- PRD, Miguel Ángel Yunes Linares no tuvieron éxito, fracasaron. Primero pusieron a Gerardo Buganza, luego a Juan Bueno Torio, uno de ellos tiró la toalla y el otro sigue en la lucha pero sin esperanza de lograr el triunfo electoral. Luego compraron a Alejandro Vázquez Cuevas y lo ponen como candidato del partido satélite del PRI, Encuentro Social. Los primeros tres días los columnistas dedicaron sus espacios informativos para denostar a Vázquez Cuevas y sacarle sus trapitos al sol, después lo ignoraron. Ahora nadie habla de él y eso es lo peor que le puede pasar a un político: que nadie hable ni bien ni mal de él.
No es un rumor que desde el PRI Nacional y Los Pinos hayan pedido la cabeza de Duarte de Ochoa. Ahora sólo falta ver a quien pondrán como gobernador interino, es muy importante conocer a la persona que suplirá a Duarte. Se mencionan muchos nombres, unos de personajes igual de corruptos que él, otros unos completos improvisados que no son conocidos a nivel estatal y nacional como la señora Erika Ayala Ríos, quien es senadora de la República gracias a que es suplente de Héctor Yunes Landa.
Las reacciones en las redes sociales sobre la renuncia de Duarte no se hicieron esperar, algunos celebran que por fin se vaya quien dejó en vergüenza a nivel nacional e internacional al Estado de Veracruz por los desvíos de recursos, su desmedida avaricia y ambición que provocó que dejara vacías las arcas estatales. Duarte también será recordado por ser el gobernador que durante su sexenio se registró el mayor número de periodistas asesinados y desaparecidos. Lo más criticable es su inmadurez política y falta de vocación por servir. El hecho de que no conecta el cerebro con la lengua al momento de subir un mensaje al twitter, texto que siempre le provoca las críticas de la sociedad veracruzana.
La mayoría de los usuarios de las redes sociales no quieren que el gobernador se vaya, no porque quisieran que se quedara a seguir despedazando a Veracruz, sino porque de esta manera el PRI Nacional y el candidato pelele del PRI, Héctor Yunes Landa buscarán proteger a Duarte para que éste no pise la cárcel ni devuelva lo que se ha robado durante los cinco años y tres meses que ha durado su administración. Saldrá por la puerta de atrás como salen de una casa las personas indeseables, con su reputación hecha pedazos pero los bolsillos llenos de dinero. No es justo, sería conveniente que le congelaran sus cuentas bancarias y le decomisaran todos sus bienes, los cuales ha adquirido gracias al dinero del erario público.
Miguel Ángel Yunes Linares manifestó a través de sus redes sociales que está en el D.F. y que está enterado de que Duarte pedirá licencia como gobernador o lo harán renunciar, para el caso es lo mismo, pero lo más preocupante es que puede huir de Veracruz protegido por los priístas a nivel nacional y sin recibir el castigo que se merece: la cárcel. Si se nota la mano del PRI protegiendo al gobernador, esto podría ocasionar la derrota inminente del candidato a la gubernatura del tricolor: Héctor Yunes Landa.