Observador veracruzano
La que por fin les dio la cara a los reporteros jarochos fue la candidata a la gubernatura de Veracruz del Partido del Trabajo, Alba Leonila Méndez Herrera, quien dio conferencia de prensa en el café de la parroquia. Llegó a las nueve de la mañana, y media hora después, ya se había ido. Fue de pisa y corre. Alba es considerada por los panistas como una traidora, pues este partido le dio la oportunidad de ser diputada local y federal, alcaldesa de Atzalan y funcionaria del gobierno federal. Aun así, ella lejos de agradecer las oportunidades que le dieron, se va con un partido pequeño que no le garantiza el triunfo en las urnas. Se vendió al mejor postor.
Para no quedarse rezagada en comparación con otros candidatos que ya presentaron su declaración patrimonial, fiscal y de intereses, Alba Leonila dijo que próximamente la presentará, pues no tiene nada que esconder. Eso dice ella. La Méndez es la única candidata mujer y tendrá que dejar bien parado al género femenino, porque la peor enemiga de una mujer es otra mujer, ellas serán sus principales detractoras si hace algo malo durante su campaña. Todos los ojos estarán puestos en Alba Leonila.
Al igual que los demás candidatos que dicen tener todo lo necesario para ganar la elección, Alba Leonila Méndez Herrera también pretende ganar la contienda, aunque ella misma ha dicho a sus cercanos que sólo se conforma con que el PT no pierda el registro. Pidió a los electores poner sus ojos en ella y considerarla como una opción más rumbo a la gubernatura de Veracruz. Exige que la gente no sólo se fije en los candidatos Miguel Ángel Yunes Linares y Héctor Yunes Landa, quienes, pésele a quien le pese, son los que más posibilidades tienen de ganar la elección. Alba Leonila, El Pipo y Juan Bueno Torio son los tres ex panistas que fueron contratados por el gobierno estatal para tratar de restarle votos al PAN. No lograrán su objetivo.