Leopoldo Tlaxalo
El alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez rindió su cuarto informe de labores de la administración municipal que encabeza y que concluye el próximo 31 de diciembre. El informe fue en uno de los salones del World Trade Center, el cual fue insuficiente para albergar tantas almas. Yunes Márquez, quien iba vestido impecablemente, comenzó su discurso presentando a algunas autoridades estatales que lo acompañaron y a su familia. Mencionó que no estaba presente su padre Miguel Ángel Yunes Linares, pero si sus hermanos, cuñadas, suegros y su esposa, Patricia Lobeira de Yunes, quien ha sido fundamental durante esta administración y lo fue en la pasada gestión.
Yunes Márquez recordó que cuando fue candidato a la alcaldía de Boca del Río la primera vez, en 2007, le puso muchas piedras en el camino el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán, obstáculos que tuvo que sortear pues le tocó ser alcalde en administraciones estatales priistas. Esto también provocó que tanto Fidel como Duarte le retuvieran recursos económicos en su momento. Miguel Ángel Yunes Márquez dijo que hoy Boca del Río es una ciudad feliz y con amplio desarrollo económico y social, pero esto costó mucho trabajo porque tenía en contra las anteriores administraciones priistas.
Yunes Márquez habló de los programas sociales que se llevaron a cabo este año como “Boca sonríe” cuyo objetivo es disminuir la pobreza y rezago social. También habló de las obras públicas que se hicieron y que son un logro de su administración como el Foro Boca, la Plaza Dorada, el Distrito Boca, el Centro de Seguridad y la estación de Bomberos, entre otros. Dijo que hay espacios para el deporte, el arte y la música, pues con estas disciplinas se pretende que los jóvenes se alejen de los vicios.