Leopoldo Tlaxalo
Después de que se ventiló que el gobierno federal que encabeza Enrique Peña Nieto espía a periodistas como Carmen Aristegui y Carlos Loret de Mola, a activistas y hasta al dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, la presidenta de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas, Ana Laura Pérez Mendoza aseguró que los periodistas veracruzanos no se han quejado de espionaje por parte del gobierno estatal, Miguel Ángel Yunes Linares. Aunque el hecho de que los periodistas veracruzanos no se hayan quejado con la presidenta de la CEAPP no significa que este sector productivo no sufra espionaje pues es bien sabido que a cualquier gobierno le gusta saber que es lo que hacen no sólo los periodistas, sino prácticamente todos los individuos que son figuras públicas.
Pérez Mendoza aclaró que ningún periodista se ha acercado a ella para quejarse por espionaje sufrido por la administración estatal yunista. Mientras ningún periodista se queje de ser víctima del espionaje, la CEAPP no iniciará ninguna investigación al respecto pues primero tiene que darse la queja y en base a ésta, iniciar una investigación para dar con los responsables. Poniéndose en los zapatos de los periodistas porque ella también lo es, Ana Laura le pidió a las administraciones municipales, estatales y federales que hagan bien su chamba, con eficacia y transparencia porque si hay inidicios de que en algunas administraciones hay corrupción, impunidad, injusticias y cosas peores, los periodistas tendrán que investigar este tipo de irregularidades y no por realizar este tipo de investigaciones deben ser espiados.
A Ana Laura Pérez le parece un exceso que no tan sólo hayan espiado a Carmen Aristegui, sino también a su hijo porque esto significa que el gobierno no sólo quiere involucrarse en la vida profesional de los periodistas, saber con quien hablan y que dicen, sino también se meten con lo más sagrado de un ser humano: su familia.