Observador veracruzano
La noche del viernes 25 de marzo se llevó a cabo la Procesión del Silencio, la cual fue encaezada por el Obispo de la Diócesis de Veracruz, Luis Felipe Gallardo Martín del Campo, quien iba acompañado de cientos de feligreses. La Procesión partió del parque Ciriaco Vázquez, ubicado en Madero esquina Lerdo y así recorrieron calles del Centro Histórico hasta llegar a la Catedral de Veracruz.
Durante el recorrido llamaron a la gente a la reflexión. El llamado se hizo a toda la feligresía en general, pero principalmente a aquellos que se encuentran ajenos, distraídos o indiferentes. La Iglesia Católica tiene que llamar a los feligreses a acercarse a Dios, no sólo en estas fechas de Semana Santa, también durante todo el año, pues la gente tiene que creer en algo espiritual y separarse y alejarse de los vicios que están destruyendo al mundo como la violencia, corrupción, indiferencia y egoísmo.
Todos los Viernes Santo se realiza la Procesión del Silencio, que es una representación plástica en la que grupos de laicos, se integran en una especie de peregrinación de carácter reflexivo (sin cánticos ni rezos) para acompañar a la Virgen María en sus horas de pesar por el calvario y la muerte de Cristo.
La Procesión del Silencio estuvo apoyada por personal de tránsito para vigilar la vialidad en las calles del centro histórico de Veracruz y evitar que hubiera accidentes, aligerarles el paso a los feligreses y darles preferencia a ellos sobre los automovilistas. Al llegar a la Catedral, todos los presentes escucharon misa.