Leopoldo Tlaxalo
Después de los lamentables hechos que se registraron la madrugada del viernes en el sindicato de Tamsa, mismos que cobraron la vida de dos trabajadores y dejaron heridos a 22 personas más, personal del Sindicato Nacional Unidad y Progreso de TAMSA así como sus familiares, en su mayoría mujeres, se manifestaron en las principales calles del Centro Histórico. Los inconformes partieron del parque Zamora, recorriendo la avenida Independencia hasta llegar al Zócalo de Veracruz donde levantaron la voz y exigieron justicia al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares y al Fiscal General del Estado, Jorge Winckler Ortiz, a quienes les piden que no les tiemble la mano para castigar a los responsables de esta balacera. Piden que caiga todo el peso de la ley en contra de Pascual Lagunes Ochoa, a quien acusan de ser el responsable de este hecho violento.
Los manifestantes llevaban pancartas, se notaba la tristeza en sus rostros y a algunos se les quebraba la voz al recordar que ya no están con nosotros los hoy occisos, pues recordaron que como consecuencia de este hecho sangriento murieron Pedro Cruz Maldonado y Margarito Alfaro, quienes pertenecían al grupo de disidentes que encabeza José Carlos Guevara Moreno. Exigen que no reine la impunidad en estos crímenes y se detenga a Pascual Lagunes Ochoa, quien sigue ostentándose como secretario general del sindicato pero, dicen, ya no cuenta con el respaldo de la mayoría de los trabajadores, quienes no quieren que siga enriqueciéndose a costillas de los trabajadores. Aparte de Pascual, también mencionaron como autor intelectual de este enfrentamiento a Vicente Ortiz Beltrán, quien es gerente de Tamsa y pudo haber evitado la tragedia. La hija de Margarito dijo que su padre trabajó 28 años en Tamsa y tenía 12 años de haber sido rescindido.
Los manifestantes llevaban un ataúd de cartón como símbolo de la muerte de dos de sus compañeros. Hicieron hincapié en que los muertos Cruz Maldonado y Alfaro eran del grupo de José Carlos Guevara Moreno, “El profe”, por lo que fueron los simpatizantes de Pascual Lagunes Ochoa los que portaban las armas de fuego. En la manifestación también salió a relucir el nombre del senador del PRI, Héctor Yunes Landa, a quien le piden que no meta sus narices en asuntos que no le competen, pues Héctor estuvo presente en una asamblea dominical hace unas semanas y apoyó incondicionalmente a Pascual Lagunes, por lo que los trabajadores que no quieren a Pascual tampoco consideran un aliado a Yunes Landa.