Observador veracruzano
A cuatro meses de la implementación de un impuesto a los refrescos en Inglaterra, una encuesta de la empresa Nielsen reporta los primeros efectos en el consumo. Antes de la entrada en vigor del impuesto el 11% de los encuestados afirmaron que sí lo reduciría, sin embargo en la última encuesta solo el 1% lo ratificó. Otro dato relevante, es que al parecer el impuesto en lugar de disminuir los hábitos de consumo solo los ha incrementado, esto se vio reflejado en los resultados de la encuesta hecha a los mismos consumidores, le cuento que- antes de que el impuesto fuera implementado arrojó que el 31% de ellos seguirían con el consumo de refrescos, en junio después de que el impuesto fuera implementado la encuesta subió a un 44%.
¿Será que a los consumidores no les gusta esta posición de estado paternalista que aplica impuestos al consumo bajo el supuesto propósito de reducir el consumo de un producto? Esta pregunta seguramente la tienen en el radar Carlos Urzua, próximo titular de la SHCP y Jorge Alcocer quien despachará en la SSA.
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