Observador veracruzano Leopoldo Tlaxalo
Teniendo como invitado de honor al diigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, el precandidato a la gubenatura de Veracruz, Héctor Yunes Landa habló durante más de 20 minutos en las instalaciones del PRI Municipal y ante la presencia de cientos de priístas, Héctor ofreció un discurso haciendo alusión a Javidú, pues dijo que en el PRI no todos son iguales. Reconoció que unos cuantos han errado el rumbo pero se echó flores a sí mismo diciendo que él es un hombre limpio al que no se le puede señalar por actos de corrupción. “No puedo transigir en el saqueo, el abuso y la arrogancia”, expuso Yunes Landa.
También le mandó un mensaje a su adversario político y primo hermano, Miguel Ángel Yunes Linares, solicitándole, después de 23 días de precampaña, que presente su declaración patrimonial, fiscal y de intereses, la llamada 3 de 3. “Si quiere combatir la corrupción, lo primero que tiene que demostrar es que no es corrupto”, comentó Héctor, quien parece que está obsesionado con las dos figuras que le pueden generar la derrota electoral: Yunes Linares y Duarte de Ochoa.
Por cierto, durante el evento del proceso interno de postulación de candidatos del PRI en el que se encontraron presentes los precandidatos Héctor Yunes Landa y Héctor Herrera Bustamante, el que dejó con un amargo sabor de boca a las líderes de seccionales fue Héctor Yunes, quien las ignoró olímpicamente y éstas se quejaron porque dicen que son el motor indispensable para que el candidato gane la elección. Hechos como éste pueden provocar que las líderes le quiten el apoyo a Héctor. Inés Espinoza dijo que está en juego el apoyo de 410 votos que pueden dárselos o no al priísta según sea su comportamiento durante la campaña, pues se quejan de que todavía no llega al poder y ya le hace fuchi a la gente del pueblo.
Por otro lado el que parece que lo pusieron de adorno como precandidato es el señor Héctor Herrera Bustamante, quien promociona sus mensajes a través de canales de televisión y radio. “Yo con Héctor”, dice la gente a la que se le pagó por mencionar esta frase en el comercial. Herrera Bustamante es un tipo gris al que pocos priístas le echaron porras cuando dio su discurso antes del de Héctor Yunes. Dicen que detrás de Héctor Herrera Bustamante está la mano negra de Fidel Herrera Beltrán.