Por: Leopoldo Tlaxalo Jaramillo
El aspirante a la dirigencia nacional del Partido Acción Nacional, Marko Antonio Cortés Mendoza estuvo este domingo en la entidad veracruzana. Por la mañana visitó Córdoba donde convivió con el aspirante a la dirigencia estatal del PAN, Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, por la tarde la militancia panista lo arropó en un evento multitudinario que se llevó a cabo en el hotel Galería Plaza.
Ahí, Marko llegó acompañado del otro candidato a la dirigencia estatal del PAN, José de Jesús Mancha Alarcón y del ex candidato a la gubernatura de Veracruz del PAN, Miguel Ángel Yunes Márquez.
Ambos eventos sirvieron para medir el músculo de Marko en comparación con el de Manuel Gómez Morín, quien también aspira a la dirigencia nacional del blanquiazul. Los dos aspirantes están hoy lunes en su cuarto día de campaña, rumbo al día de las elecciones que es el 11 de noviembre. Dicen que serán los militantes panistas los que elijan a sus próximo dirigentes. Algunos todavía dudan que habrá transparencia en este proceso electoral interno, pues consideran que todo está planchado para que gane Marko Antonio. Hay algunas voces al interior del PAN que dicen que Marko Cortés es la persona menos indicada para llevar las riendas del PAN a nivel nacional, porque si bien es cierto que tiene liderazgo, no tiene el mejor perfil ni es un ejemplo de honestidad. En este tipo de eventos hay que ser muy observador y ver con quien se rodea Marko Antonio. Uno de ellos es el aspirante a la dirigencia estatal del PAN, José de Jesús Mancha Alarcón, quien tiene señalamientos de corrupción y a pesar de que él diga lo contrario, se sirvió con la cuchara grande cuando fue dirigente estatal del PAN. Y todavía se dio el lujo de dejar a su esposa como diputada local plurinominal. Eso no cualquiera lo puede presumir, su esposa es el orgullo de su nepotismo. ¿Creerá Mancha que los cargos en el Congreso del Estado son para colocar a sus familiares?
Otro personaje de los que se rodeó Cortés en su visita a Veracruz fue el ex candidato a la gubernatura de Veracruz del PAN, Miguel Ángel Yunes Márquez, quien va en la planilla de Marko. De Yunes Márquez se pueden decir muchas cosas, pero no todas son ciertas, unos dicen que se está colgando del proyecto de Marko para seguir vigente en la carrera política, después de que no se le hizo ser gobernador de Veracruz “por un fenómeno natural y no por un voto razonado” como dijo el propio Miguel en una parte de su discurso. Lo cierto es que MAYM es lo más rescatable que hay en la política veracruzana.
Los panistas de arraigo dentro del partido, aquellos que llevan muchos años picando piedra y que nunca han sido considerados para ningún cargo de elección popular, aseguran que la mejor carta que tiene el PAN rumbo a la dirigencia nacional es Manuel Gómez Morín, a quien califican como un hombre de probada honradez, pero que desafortunadamente no tiene posibilidades de ganar la elección interna, pues consideran que el ganón será Marko, quien es apoyado por 9 gobernadores del blanquiazul. Hay que recordar que del plato a la boca se cae la sopa y que de aquí a 27 días, pueden suceder muchas cosas que inclinen la balanza hacia uno u otro aspirante.
Marko Cortés es un joven que nació con estrella, a sus 40 años ha tenido cargos de elección popular que otros que llevan más años en el PAN no han tenido. El panista, originario de Michoacán, ha sido diputado federal en dos ocasiones y senador. Quiso ser candidato a la presidencia municipal de Morelia en 2011, pero no lo logró. Su adversario en la contienda interna, Manuel Gómez Morín, lo acusó de desvío de recursos durante su campaña. Mucha gente se pregunta si es realmente honesto o corrupto, porque dudan que alguien que tiene más de 20 años en la política sea honesto, pues consideran que la corrupción es una tentación a la que pocos políticos pueden decirle que no.
A pesar de que Marko jure y perjure que no utilizará la dirigencia nacional del partido para buscar algún cargo de elección popular a futuro, la gente no cree en sus palabras, pues ya vieron cual fue el modus operandi de Ricardo Anaya Cortés, quien siendo dirigente nacional del PAN, saltó a la candidatura a la presidencia de la República. Lo mismo puede hacer Marko Cortés, de hecho ese es su plan, según dicen allegados a él. Marko Cortés podría buscar la presidencia de la República en 2024, esas son sus intenciones. Muchos panistas se preguntan: ¿realmente Marko Cortés es la mejor opción para dirigir el PAN a nivel nacional? Se contestan que no, pero poco pueden hacer para evitar que llegue a la dirigencia, pues las encuestas internas lo ubican arriba de su más cercano competidor.
“Ya se acabaron los tiempos en los que la gente incursionaba en la política para hacer el bien común, para ayudar a la gente, ahora todos quieren entrar a la política para tener una mejor forma de vida: dinero, poder, cargos y más cargos. Y cuando llegan al poder se olvidan del pueblo, de la gente que los ayudó a llegar a donde ellos querían estar. Es muy triste ver en lo que se han convertido aquellos que vimos crecer como políticos y ahora son unas personas sin corazón que no le tienden la mano a nadie si no reciben antes un beneficio. Los políticos de ahora no dan paso sin huarache”, dijo una persona que prefirió que su nombre quedara en el anonimato.
Este miércoles 17 de octubre arriba al puerto de Veracruz el otro candidato a la dirigencia nacional del PAN, Manuel Gómez Morín, y ya se verá de que cueros salen más correas, quien realmente es apoyado por los panistas de verdad y quien jala acarreados a sus mitines. Gómez Morín, dicen los que saben, va repuntando en las preferencias de los panistas que quieren un verdadero cambio dentro de la vida interna del partido. Ya Margarita Zavala salió a decir que el triunfo de Gómez Morín representaría un respiro para el PAN. Habrá que ver quien gana la elección del partido y ya veremos si fue una decisión acertada la de los panistas o no. Que gane el mejor, aunque no siempre gana el más preparado sino el que le conviene a los intereses de unos cuantos.