Leopoldo Tlaxalo
Cansados de la inseguridad y hechos delictivos que se han desatado en las últimas semanas y en el que se han visto afectados los trabajadores del volante, taxistas que operan en Veracruz-Boca del Río-Medellín se manifestaron en contra de la inseguridad exigiéndole al gobierno que ponga un alto a estos asaltos y asesinatos de los son víctimas los taxistas, quienes se encuentran a merced de la delincuencia. Los ruleteros están desesperados, no es la primera vez que expresan su sentir ante esta problemática que ha cobrado la vida de más de 10 taxistas, seis de ellos ejecutados en el mes de octubre. Temen que el gobierno no frene esta situación y sigan ocurriendo homicidios en contra de ellos.
Al frente de su manifestación pacífica, los taxistas llevaban una lona grande que decía con letras grandes “Ni uno más”. En el gobierno duartista también se registraban asaltos, dijo uno de los afectados, quien prefiere guardar su identidad en el anonimato por miedo a las represalías, pero en la actual administración aparte de asaltar y secuestrar a los ruleteros también los están matando, acción con la que le quitan a una familia a la figura paterna, al proveedor del hogar, dejan a unos hijos en la orfandad y a una mujer que tiene que hacer circo, maroma y teatro para sacar adelante a su familia sin el apoyo de un hombre. El afectado dijo que durante este gobierno estatal es cuando la inseguridad más se ha recrudecido, pues los delincuentes son despiadados con ellos. No se conforman con quitarle unos cuantos pesos, fruto de las corridas del día, también los golpean, les quitan su unidad y en casos extremos los asesinan.
En el oficio de los taxistas no sólo ofrecen el servicio los hombres, también se ven damas metidas a este digno oficio, quienes desafortunadamente también son víctimas de la delincuencia. Ellas por ser mujeres corren más peligro pues no sólo pueden asaltarlas y secuestrarlas, también ultrajarlas. De hecho hay un caso de una taxista mujer a la que asaltaron y quisieron asfixiarla metiéndola a una cajuela, pero por fortuna no murió y vive para contar esta amarga experiencia que quisiera olvidar pero no puede.
Lo más lamentable es que el gobierno solo escucha las peticiones de los taxistas, pero no hace nada por solucionar el problema de inseguridad, no hay estrategias inteligentes para erradicar la inseguridad, el tiempo pasa y cada día son más las víctimas de la delincuencia. Y un porcentaje de estas víctimas, son ejecutadas. A la manifestación de los taxistas acudió el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Jaime Téllez Marie, pero sólo estuvo unos minutos, habló con unos taxistas y se fue. A él no le preocupa la inseguridad porque como funcionario que es, siempre está resguardado por policías que lo cuidan día y noche. Los taxistas esperaban que el titular de la SSP, estuviera más tiempo con él y les ofreciera una solución a su problemática. Lamentablemente a Téllez Marié le falta sensibilidad para hablar con la población vulnerable y experiencia en temas de seguridad.