
El obispo de la Diócesis de Veracruz, Carlos Briseño Arch, aseguró que la pandemia del Covid-19 ha afectado la economía de todos por igual y la iglesia no es la excepción pues aproximadamente 40 por ciento de las parroquias que hay en Veracruz registran afectaciones económicas.
Añadió que en la Diócesis de Veracruz hay 90 parroquias, más los templos que es un número mayor al de las parroquias. “Yo les digo a los padres que al final de cuentas lo que deben fomentar es la caridad de sus fieles, no tanto estarse viendo el ombligo sino ver hacia afuera que es nuestra misión y verdaderamente entre más vemos hacia afuera y ayudamos a los demás, Dios no se deja ganar en generosidad”, dijo.
Desde hace unos meses, las iglesias abrieron sus puertas con el aforo que les autorizan las autoridades sanitarias. Esto ha permitido que los párrocos de las iglesias obtengan recursos económicos por las aportaciones que los feligreses hacen. La limosna les sirve a los párrocos para pagar los servicios básicos de las iglesias.
El Obispo de la Diócesis de Veracruz estuvo presente en la inauguración del dispensario de la Casa Santa Ana, ubicada en el municipio de Boca del Río.