Por: Leopoldo Tlaxalo Jaramillo
Todavía no entra a gobernar Veracruz, aun faltan 101 días para que inicie el nuevo gobierno y son altas las expectativas que el pueblo veracruzano tiene del gobierno estatal que encabezará Miguel Ángel Yunes Linares, después de una desastrosa administración que tuvo el sello de la corrupción, impunidad, nepotismo, excesos, despilfarros y cinismo por parte del que dice gobernar Veracruz y que va en picada en la recta final de su sexenio. El pueblo veracruzano está urgido de que haya un cambio real en este Estado que se ha teñido de rojo por todos los feminicidios, enfrentamientos entre bandas delincuenciales que han arrojado miles de muertos, crímenes por odio y homofobia, además de los miles de desaparecidos que son llorados y recordados por sus familiares, quienes los siguen buscando con la esperanza de algún día encontrarlos. Muchos padres de familia de los desaparecidos durante este sexenio invierten cantidades fuertes de dinero en espectaculares, donde ofrecen recompensa a quien brinde datos que ayude a la localización del familiar ausente.
En ningún otro sexenio se recuerda una cantidad alarmante de desaparecidos como en éste que está por concluir el 30 de noviembre. Los veracruzanos están ávidos de una luz de esperanza que les devuelva la paz y tranquilidad que les han robado y haga justicia por todas las injusticias que han padecido. El gobernador electo de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares tiene frente a sí el reto más importante de su carrera política y de un buen gobierno asumido dependerá que le den responsabilidades más grandes en el futuro donde pueda seguir ascendiendo políticamente.
Para nadie es un secreto que después de los triunfos que tuvo el PAN en siete Estados de la República Mexicana en las elecciones pasadas, el siguiente paso es recuperar la presidencia de la República y para que esto sea posible tienen muchas cosas a su favor, entre ellas el mal gobierno de Peña Nieto, quien ha puesto todo en bandeja de plata para el próximo triunfo de la oposición, sea cual sea las siglas del partido que encabezará el sexenio federal.
Para que el triunfo del PAN sea posible se requiere tener un buen candidato que garantice la victoria hasta en el más adverso de los escenarios. Son muchos los nombres que se barajan como posibles aspirantes, pero aun es prematuro inclinarse por uno en especial pues falta un año o un poco más para que el escenario de quien será el candidato del PAN a la presidencia de la República sea más claro. El nombre del político veracruzano Miguel Ángel Yunes Linares suena muy fuerte en los últimos días, pues de todos los que se mencionan es el que más experiencia y trayectoria posee, aunado a las relaciones nacionales que ha cosechado y seguirá haciéndolo en estos dos años de su periodo como gobernador.
Yunes Linares no ha querido hablar de sus aspiraciones políticas, pero no le disgusta la idea de que se le mencione como presidenciable. Al contrario, es un orgullo para él que su nombre aparezca en esta codiciada lista. De ser designado candidato a la presidencia de la República, Yunes Linares dejaría inconcluso su bienio como gobernador que de por sí es corto.
Otros nombres que se mencionan como posibles aspirantes son Margarita Zavala, Ricardo Anaya Cortés y Rafael Moreno Valle, más los que se acumulen. Yunes Linares tiene la ventaja de que los supera en experiencia y capacidad a todos ellos. Se tendrán que hacer encuestas para ver cual de los presidenciables está mejor posicionado en la imagen del colectivo mexicano y de acuerdo a estos resultados, tomar una decisión. Si Miyuli fuera presidente, estaría logrando algo que ni siquiera su acérrimo enemigo Fidel Herrera Beltrán logró, sería la envidia de su primo Héctor Yunes Landa y estaría sepultando políticamente hablando a Javier Duarte,quien después de ser gobernador no logrará que nadie lo contrate porque demostró incapacidad y estar mal de sus facultades mentales.