Sergio Lara
Manuel Huerta Ladrón de Guevara, dirigente estatal del Movimiento de Regeneración Nacional, denunció públicamente que en Veracruz hay una campaña de desprestigio en contra de los alcaldes de los ayuntamientos donde gobierna MORENA pues en los municipios de Xalapa, Coatzacoalcos y Minatitlán el gobierno estatal entorpece el trabajo de los ediles. Huerta Ladrón de Guevara considera que detrás de las manifestaciones que les han hecho a los alcaldes está la mano negra de Yunes Linares. Aunque no tiene pruebas de sus dichos, añadió que al gobierno estatal le interesa hacer quedar mal a los alcaldes de MORENA para que los habitantes de esos municipios se decepcionen y lo piensen dos veces antes de volver a votar por ese partido.
El dirigente dijo que en Coatzacoalcos se les permitió a los líderes sindicales mantener privilegios a pesar que se entorpece el trabajo del ayuntamiento. “Es un sindicato al cual un tribunal estatal, que siempre se ha caracterizado de actuar bajo consigna del gobierno estatal, está dando un reconocimiento contrario a lo que la sociedad está buscando de acabar con los privilegios de los líderes”.
En temas de seguridad el regordete hombre puso el dedo en la llaga al señalar que personas que trabajaban con el ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, siguen laborando en la dependencia, por lo que sugirió que haya una reconfiguración de la Secretaría de Seguridad Pública y que corran a aquellos malos elementos con los que trabajó Bermúdez y que sigue sosteniendo en la actual administración el hoy titular de la SSP, Jaime Téllez Marié.
Huerta añadió que el hecho de que Bermúdez tenga a su gente dentro de la SSP es mala señal de que el cáncer dentro de esa institución sigue presente. Esta anomalía ha permitido que un grupo de la policía estatal siga cometiendo actividades ilícitas, como quedó comprobado con la detención de un grupo acusado de desapariciones forzadas.
El funcionario de MORENA considera que si Yunes Linares quiere que haya un cambio debe de evaluar el desempeño de la policía estatal y sacar a los malos elementos que le hacen daño a la corporación y la desprestigian. Para ello se deben hacer filtros de control, exámenes de confiabilidad, de antidoping, investigar el pasado de esos policías, si participaron o no en hechos delictivos y no permitirles seguir en la Secretaría de Seguridad Pública.