Observador veracruzano

Gilberto Aguirre Garza, ex director de Servicios Periciales de Veracruz, fue liberado del Centro de Readaptación Social de Pacho Viejo luego de que la Comisión Estatal de Derechos Humanos comprobó que sufrió tortura para que declarara contra otros ex funcionarios. Aguirre Garza dejó la cárcel y se le dictó prisión domiciliaria.
Un juez federal le concedió al ex funcionario – acusado presuntamente de ocultar en el papel cadáveres hallados en una zona de Veracruz-, salir del Centro de Readaptación Social de Pacho Viejo, para seguir su proceso penal en prisión domiciliaria. El abogado Jorge Reyes Peralta, defensor del colaborador del ex fiscal Luis Ángel Bravo Contreras, aseguró que el juez determinó que era excesiva la prisión preventiva, sin embargo consideró que debería estar en libertad porque un organismo de derechos humanos comprobó que fue sometido a tortura.
“El hecho de tenerlo preso en su casa y cuidado por la Fiscalía y los policías del fiscal verdugo Jorge Winckler no es justicia, es una justicia a medias. Vamos a impugnar la medida ante el Tribunal Colegiado en Materia Penal”, indicó.Acusó al magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Edel Humberto Álvarez Peña, de servir “al amo que lo maicee mejor”, pues dijo que él y la jueza Mónica Segovia han violado los derechos de Gilberto Aguirre.