Después de que algunos medios de comunicación dijeran que el sanitizante que utiliza en colonias, empresas y en el transporte público es tóxico, el empresario Antonio del Río Argudín acudió a las instalaciones de la Procuraduría Estatal del Medio Ambiente para llevar una muestra del producto y comprobar que no provoca ningún daño en la piel de las personas.
A Antonio del Río no lo dejaron penetrar en el interior de la Procuraduría, prácticamente le cerraron la puerta en las narices y antes de que ofreciera una entrevista con los medios de comunicación, un empleado de la PMA le pidió que guardara una sana distancia de 50 metros.
No fue atendido por el procurador, pero lo recibió en la puerta de ingreso el sub procurador quien le dijo que no era prioritario sanitizar Veracruz. El funcionario añadió que en la PMA no certifican los líquidos.
Antonio dijo que solicitará un amparo de la justicia federal para seguir sanitizando Veracruz.