Observador veracruzano
A pesar de todo el dinero y tiempo que han aprovechado los investigadores en el estudio de la recurrencia del cáncer de mama, predecir cuándo y porqué la enfermedad resurge sigue siendo todo un misterio.
Aunque los expertos siguen investigando los mecanismos detrás de la recurrencia del cáncer de mama, se han comprobado ciertos cambios en nuestro estilo de vida y conductas que podrían disminuir el riesgo.
Muévete
El ejercicio regular (entre 2 ½ horas a la semana) es el factor de estilo de vida más importante en cuanto a riesgo de recurrencia. Desafortunadamente un número muy bajo de sobrevivientes de cáncer de mama llegan a alcanzar esa meta, pues es difícil canalizar tanta energía a la semana.
Mantén tu peso
Perder peso, aunque sea un cambio saludable, no está relacionado firmemente con un menor riesgo de recurrencia de cáncer de mama. Aún así, hay buena evidencia que mantiene que evitar subir de peso y llevar una dieta saludable durante y después del tratamiento, ofrece cierta protección.
Evita tomar mucho
Tomar alcohol en moderación (3 a 4 bebidas a la semana) es seguro y razonable. Pero tomar todos los días es algo que debes evitar. Un estudio hecho por el Diario Internacional de Cáncer, descubrió que los sobrevientes que tomaban más de una bebida al día, tenían 28% más probabilidades de sufrir una recurrencia.
Toma tus medicamentos
Ser efectivos con los medicamentos preescritos es crítico para disminuir el mayor riesgo de recurrencia posible. Múltiples estudios demuestran que los agente anti-estrógeno pueden bloquear que el cáncer de mama vuelva. Pero gracias a sus efectos secundarios y otros factores, muchas mujeres dejan de tomarlos.
Toma más A y C
Aunque la evidencia dice que la suplementación de vitaminas no es muy fuerte, se cree que los suplementos de vitamina C reducen la recurrencia del cáncer de mama. De igual manera, los niveles bajos de vitamina D están relacionados con peores resultados de cáncer.
Toma té verde
De nuevo, la investigación está incompleta. Pero las mujeres diagnosticadas con etapa temprana de cáncer de seno que toman mucho té verde, parecen estar más protegidas de su recurrencia. No se sabe exactamente a qué se debe tal protección, pero debe aprovecharse.