Chiquiyunes, Pepe Yunes y Cuitláhuac, ¿quién será el bueno?

Por: Leopoldo Tlaxalo Jaramillo

Ya están definidos quienes serán los candidatos a la gubernatura del Estado de Veracruz de los tres partidos políticos más fuertes quienes se aliaron con partidos pequeños conscientes de que la unión hace la fuerza y de que nadie llega al poder sin la ayuda de otros aliados. Por el lado del PAN se alió con el PRD y Movimiento Ciudadano, el candidato será Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo del actual gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. El Partido Revolucionario Institucional llevará como candidato al senador José Francisco Yunes Zorrilla, el PRI hizo alianza con el Partido Verde Ecologista de México y Nueva Alianza. El Movimiento de Regeneración Nacional, partido que dirige Andrés Manuel López Obrador, llevará como candidato a Cuitláhuac García Jiménez. MORENA irá en coalición con el Partido del Trabajo y el Partido Encuentro Social. Con éste último partido no tiene ninguna similitud en cuanto a la ideología, pues mientras unos están a favor del aborto y de los matrimonios entre personas del mismo sexo, otros no aprueban que se realicen estas prácticas. 

Así como MORENA  y el PES tienen diferencias ideológicas, también las tienen los demás partidos políticos con los que hicieron alianza, pues no se puede mezclar, bajo ninguna circunstancia, la izquierda con la derecha ni siquiera para intentar acabar con el enemigo, aunque los líderes nacionales y estatales de los partidos políticos no piensan así. Ellos consideran que en la guerra, en el amor y en la política todo se vale aunque tengan que comer caca….huates sin hacer gestos. Lo importante para ellos es ganar la gubernatura de Veracruz y no les importa si para ello tengan que juntarse con quien en el pasado consideraron sus adversarios o personas con las que abiertamente reconocieron que no tenían ninguna coincidencia. 

Los tres candidatos a la gubernatura del Estado de Veracruz: Miguel Ángel Yunes Márquez, José Francisco Yunes Zorrilla y Cuitláhuac García Jiménez tienen posibilidades de ganar, pues cada uno de los partidos que representan tiene ventajas y desventajas. Habrá que ver como reacciona el electorado veracruzano en esta elección, pues en cada contienda electoral reaccionan de manera diferente. Y la elección del 2018 será diferente a otras que han vivido los veracruzanos tomando en cuenta que el próximo año se elegirán candidatos a la presidencia de la República, a la gubernatura de Veracruz, diputaciones locales y federales y senaduría. Habrá electores que voten de manera diferenciada, es decir, por un partido para la presidencia de la República, por otro para la gubernatura y por otro muy distinto para las diputaciones locales, de acuerdo a la experiencia que hayan tenido con los actores políticos que estén despachando actualmente en los cargos que se renovarán el próximo año. 

Aunque mucha gente pudiera pensar que Miguel Ángel Yunes Márquez tiene todo en bandeja de plata para ser el próximo gobernador de Veracruz, no es así, pues a pesar de que cuenta con el cariño de la ciudadanía boqueña, quienes votarían por él con los ojos cerrados por el buen trabajo que desempeñó durante los dos periodos que despachó como alcalde de Boca del Río, la campaña no será fácil para Yunes Márquez pues tiene en contra el hecho de que su padre, el gobernador de Veracruz Miguel Ángel Yunes Linares no ha podido erradicar el problema de inseguridad como él prometió que lo haría en seis meses. La inseguridad es el principal problema que aqueja a los veracruzanos pues todos corremos el riesgo de ser asaltados, secuestrados, extorsionados o asesinados brutalmente por delincuentes que no se tocan el corazón para acabar con la vida de sus víctimas. La promesa relacionada con la seguridad que no cumplió su padre será uno de los grandes pendientes en la campaña de Yunes Márquez. Será su tarea tener argumentos sólidos frente a los electores para que éstos comprendan que para ningún gobierno es fácil erradicar completamente la inseguridad. 

José Francisco Yunes Zorrilla tiene en contra que fungió como diputado local y senador durante las administraciones de los ex gobernadores de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa y nunca los cuestionó por sus actos de corrupción cuando tenía la facultad para hacerlo y velar por los intereses de los veracruzanos. Pero a Pepe le importó más quedar bien con el PRI y los gobernadores emanados de su partido que con los veracruzanos….Ahora los veracruzanos le pagarán con la misma moneda, le demostrarán que para ellos es más importante su bienestar económico y social que volver a ser gobernados por el mismo partido que ha llevado a la quiebra a Veracruz.  

 

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