Leopoldo Tlaxalo

Desde antes de que tomara posesión como diputada local del Congreso del Estado, María Josefina Gamboa Torales siempre se había caracterizado por no contradecir en nada al ahora gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares. Aunque no estuviera de acuerdo con él en algunas cuestiones, ella trataba de llevar la fiesta en paz con el patriarca de los Yunes, pero ahora que Maryjose presentó una iniciativa para que circularán los mototaxis en la zona rural del Estado de Veracruz, -lugar en donde no pasa el transporte-, Yunes Linares se opuso rotundamente a la iniciativa de Maryjose y prometió desecharla. Y es que el gobernador anunció, a través de un boletín que no permitirá ni una concesión más al transporte, pues considera que éste está saturado y hace falta meter orden y sacar de circulación aquellos vehículos que ya cumplieron con su vida útil.
A Yunes Linares no le importa que la iniciativa la haya presentado Maryjose, él está velando por el bienestar de los veracruzanos. Maryjose, quien siempre se ha caracterizado por escuchar a los oprimidos, considera que los mototaxis serían útiles en la zona rural. La iniciativa ya fue aprobada por el Congreso local, por lo que hay un grupo en el poder que si está a favor de que circulen los mototaxis y otro, el más poderoso, el que representa el poder Ejecutivo, quien amenazó con vetar la iniciativa. Hay temor de que la meta a la congeladora.
La cosa ya se puso tensa entre la Gamboa y Miyui pues ella acusó al gobernador de proteger a las mafias del transporte. “El gobernador está protegiendo a las mafias transportistas, no está protegiendo el derecho de 2.7 millones de personas que no tienen como transportarse”, dijo Maryjose y hasta lo acusó de estar mal informado, pues la iniciativa de Maryjose no busca que haya más concesiones. Sólo quiere que se beneficien las familias de la zona rural que viven del servicio de mototaxis, el cual no estaba regulado. Maryjose añadió que la concesión, placas y engomado tendrán un costo menor a los 10 mil pesos para no dañar la economía de las familias de la zona rural.