
La estudiante de la carrera de Arquitectura de la Universidad del Valle de México, Sofía Morales difundió a través de las redes sociales una queja en contra de la UVM, pues ya había aprobado una materia y después la universidad le informó que no estaba aprobada.
La joven pidió que se revisaran los archivos para constatar que efectivamente se encontraba aprobada en la materia pero los directivos se negaron a su petición y le pidieron que vuelva a cursar la materia, lo cual significaría para la joven más gastos por un error que no es suyo, sino de la institución educativa donde Sofía cursa la carrera.
La afectada afirmó que no es el primer caso que sucede en esta institución, pues se han registrado varias quejas de alumnos inconformes y ninguna autoridad soluciona los problemas de los alumnos. Sofía Morales solicita que las autoridades educativas intervengan en su caso pues son irregularidades de los maestros de la universidad que están afectando a la matrícula estudiantil.
Morales envió correos electrónicos, realizó llamadas y reclamó a las autoridades de la universidad, pero no resolvieron a su favor, le indicaron que tenía que volver a cursar la materia. Ella se siente impotente pues está siendo víctima de una injusticia. Considera que es una práctica mañosa de los maestros y directivos de la escuela para obtener más ingresos económicos, pero esta acción perjudica a los alumnos, quienes gastan dinero del suyo o del de su familia para pagar las colegiaturas, se esfuerzan para aprobar las materias y dedican su tiempo al estudio de sus materias para que al final su constancia y esfuerzo no sea recompensado con una calificación aprobatoria.
“Una vez más queda claro y evidenciado que no les interesan los estudiantes, así como tampoco los padres de familia y/o tutores, solamente el dinero”, comentó en sus redes sociales la estudiante universitaria.