
Ante la emergencia sanitaria declarada por el gobierno federal por la pandemia del coronavirus, muchos restaurantes en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río tuvieron que cerrar sus puertas, señaló el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en Veracruz, Santiago Martínez Dordella, quien aseguró que han cerrado sus puertas 450 restaurantes, lo que representa más del 50% de los comercios dedicados a la venta de alimentos que están afiliados a la Canirac.
Al darse los cierres temporales de las empresas hay posibilidades que en un futuro puedan ser cierres permanentes porque podría darse el caso de que los restauranteros no se repongan económicamente del daño que les representa mantener cerrados sus negocios un mes. Y desafortundamente si siguen saliendo de sus casas algunos mexicanos, la pandemia podría agravarse, esto generaría que la emergencia sanitaria se alargue otro mes o meses tomando en cuenta que el subsecretario de Promoción y Prevención de la salud, Hugo López- Gatell declaró que la pandemia podría durar hasta agosto o septiembre.
El cierre de los restaurantes afectó la fuente laboral de aproximadamente 5,000 trabajadores.
Martínez señaló que los trabajadores están siendo afectados en su economía, pues a pesar de que sus patrones les dan un sueldo mientras están en casa, no se sabe si en próximos meses los restauranteros contarán con la solvencia económica para seguir dándole sueldo a sus empleados, quienes están desesperados en sus casas por esta situación porque ganan más con las propinas.
Concluyó diciendo que los empresarios del sector turístico están perdiendo dinero al mantener sus comercios cerrados y a pesar de que muchos comercios están ofreciendo servicio a domicilio, cada día es menor la gente que sale de sus casas a consumir en algún restaurante por lo que hay pérdidas económicas considerables.