Leopoldo Tlaxalo

Ignacio Benavente Torres, presidente de Pro Libertad y Derechos Humanos en América, estuvo en el primer congreso estatal y toma de protesta de la delegación Veracruz que encabezará Juan Hernández de Jesús.
El evento se llevó a cabo en un salón del puerto de Veracruz, también estuvo el delegado regional de los Estados de Veracruz, Puebla y Tlaxcala, Antonio Morales Murguía; así como la presidenta de la asociación civil “Por un Veracruz sin discriminación”, Flypy Morales de Franco, quien representa a los miembros de la comunidad LGBTTTI, entre otros.
Ignacio Benavente dijo que las personas que más sufren violaciones a sus Derechos Humanos son los migrantes, personas que por diversas circunstancias están lejos de su país y tienen que abrirse camino en otro país para poder subsistir. Cuando un migrante recibe la ayuda de una persona, el migrante por lo regular siempre agradece el gesto amable de quien le da la mano y es capaz de dar la vida por esa persona. Los migrantes sufren mucho en un país donde no conocen las leyes, donde son mal vistos por los demás ciudadanos y tienen que ganarse la vida para mandarle dinero a su familia.
El presidente de Pro Libertad y Derechos Humanos en América, Ignacio Benavente Torres, puso en marcha la Delegación de ese organismo internacional en el estado de Veracruz, cuya sede es la conurbación Veracruz-Boca del Río y queda a cargo de Juan Hernández de Jesús.
En su visita a la ciudad de Veracruz, donde tomó protesta a los integrantes de la Delegación Estatal, señaló que la misión de PLDH es promover, difundir y enseñar los derechos humanos de las personas en vulnerabilidad, para que puedan reintegrarse a la comunidad, en especial los migrantes y personas privadas de su libertad.
Explicó que desde el año 2013, cuando se fundó el organismo, además de contribuir con la defensa de los derechos, también se ha dado apoyo a los sectores vulnerables, a través de asistencia a migrantes, albergue universal, comedor, asesoría legal, capacitación y bolsa de trabajo.
Ante representantes de otros municipios destacó que cuando un migrante recibe la ayuda solidaria, es capaz de dar la vida por quien le extendió la mano amiga, y deploró el maltrato a quienes dejan a su familia y su país en busca de mejores oportunidades en el extranjero.
Aseguró que son precisamente los migrantes y los desaparecidos los grupos en mayor riesgo y los más castigados por la intolerancia, la incomprensión, la falta de solidaridad y peor aún, por la discriminación por su origen y su estatus migratorio.
Dijo que 9 de cada 10 migrantes no constan en los registros oficiales de las instituciones porque ingresan a México en forma ilegal, son indocumentados y por tanto, inexistentes en términos estadísticos, de modo que es como si nunca hubieran cruzado la frontera.
Lamentó que se criminalice al extranjero indocumentado, a quien se ve como delincuente sin que lo sea y lo que es peor, que en la frontera entre Estados Unidos y México a muchos migrantes los hayan convertido en adictos al suministrarles estupefacientes contra su voluntad.
Benavente Torres se dijo seguro de que la situación de los migrantes y los connacionales puede cambiar, para que las mujeres y los niños, que son altamente vulnerables a la delincuencia, puedan desarrollarse y vivir en tranquilidad y en seguridad.
Pro Libertad y Derechos Humanos en América pone su grano de arena, pero la ciudadanía debe contribuir a poner fin a la criminalización y a fortalecer la cultura de la denuncia cuando alguien transgrede sus derechos elementales, para que las instituciones del estado apliquen la ley y no haya impunidad.
La toma de protesta se realizó en un salón ubicado en Luz Nava entre 2 de Abril y Negrete, al cual acudieron los integrantes de la Delegación Estatal de PLDH Veracruz.
También acudieron representantes de instituciones gubernamentales del estado de Veracruz y de asociaciones civiles.