Sergio Lara
El Obispo de la Diócesis de Veracruz, Carlos Briseño Arch opinó sobre el lamentable caso de Estefany Naomí, la adolescente que fue asesinada por uno de sus compañeros de la escuela en el municipio de Tecolutla la semana pasada. El Obispo considera que el descuido de los padres de familia en acompañar y guiar a los hijos es el motivo de la violencia que emplean los jóvenes.
“Están dejando que vean y escuchen sin estar viendo lo que están recibiendo y razonando, en otros tiempos a los 13 años un niño buscaba jugar con la pelota y ahora tantas cosas que se les mete a los infantes sin tener necesidad”, dijo Carlos Briseño Arch.
Ante el descuido de los padres, niños y jóvenes hacen uso de aparatos celulares y otros equipos tecnológicos, además del consumo de videojuegos de naturaleza violenta.
“Muchas veces ese tipo de cosas pueden suceder porque los niños todavía no saben ni leer, y ya están con la tablet y con juegos que generan violencia, y ahí es donde yo llamo a los padres a que acompañen más a sus hijos, que vean que tipo de mensajes están recibiendo a través de esos jueguitos que parecen muy inocentes pero en el fondo están dando mensajes de violencia”.
En la actualidad escandaliza otro tipo de situaciones, pero se normaliza la violencia. Por ello insistió en que el caso de la menor asesinada en el municipio de Tecolutla por otro menor es reflejo de la falta de atención de los padres a los hijos de saber lo que están viviendo y haciendo.
Cuando los hijos son menores de edad la responsabilidad de educar y orientar recae en los padres, cuando ya se alcanza la mayoría de edad todos los actos buenos o malos es responsabilidad de la persona.
El religioso pidió a los padres que brinden acompañamiento en el desarrollo de los niños, pues mientras el niño esté al cuidado de sus padres, estos últimos deben de ser los responsables de su sano desarrollo, inculcando los valores que necesita para su convivencia diaria.