Expareja le quitó con engaños a su hija
* Pide justicia pues teme por la vida de Catalina
Karen Paulina Arrieta Moore, joven originaria de Durango, es víctima de violencia vicaria; Mauricio “N”, su ex pareja, le quitó con engaños a su pequeña hija de un año Catalina, desde diciembre de 2022.
A fines del año pasado, la chica fue convencida con engaños por su expareja para traer a la pequeña Catalina a Veracruz, con el pretexto de que los abuelos paternos estaban tristes al no convivir con la pequeña.
Una semana después la obligaron a irse de la casa, la corrieron y se quedaron con Catalina.
Acudió a la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia Contra la Familia, Mujeres, Niñas, Niños y de Trata de Personas, para interponer una denuncia, en tanto Mauricio N tramitó un depósito de menor en el Juzgado Décimo Cuarto del Familiar, y el juez Víctor Fernández Luna se lo concedió, avalando una ilegalidad, toda vez que Karen contaba con la custodia de la pequeña.
La mujer ha demandado atención a su caso, “El 28 de marzo tengo una audiencia penal, sobre mis denuncias de sustracción de menor y violencia familiar, ahí en la Fiscalía Especializada de lo Familiar ahí en Vistamar, también ahí va a ser vinculado a proceso si las autoridades actúan como debe ser”, explicó.
Teme por la vida de su hija.
“Yo hago una súplica y un llamado, sobre todo al Juez Cuarto de Distrito, que es el que tiene hoy en día mi caso después del amparo que interpuso este señor sobre su depósito revocado. Pues mi súplica es, sobre todo para salvaguardar la integridad de mi hija, ya que corre un peligro inminente bajo el cuidado de este señor y su familia, ya que es tan solo una bebé de un año seis meses de edad y necesita de su mamá, fue arrebatada de mis brazos muy pequeña, solo al año de edad, las autoridades tardan y atrasan mucho mi situación, y lo único que pido es que se haga justicia”.
Catalina nació luego de que en 2020 sostuvo una breve relación con Mauricio, misma que terminó debido a conductas violentas y agresivas sobre su persona por parte del padre de su hija.
Cuando estaba embarazada Mauricio ejerció violencia física y psicológica contra de ella; en una ocasión la quiso bajar del automóvil en marcha tras una pelea, a pesar de su avanzado estado de gestación.
Lamentó que la Fiscalía Especializada no actúa como debiera, cambiaron las fechas de la carpeta de investigación, extraviaron documentos importantes del caso, a sabiendas del riesgo de correr la pequeña Catalina.
El depósito tramitado por el padre fue revocado en lo civil y aun así a Karen solo le permiten convivencia supervisadas en el Centro de Convivencia Familiar (Cecofam).
Recordó que en su primera visita al Cecofam encontró a su pequeña con lesiones internas y externas en sus partes íntimas, y solicitó a las autoridades una atención especial a la pequeña debido a los antecedentes de violencia de su padre y su familia.
Algunas ex parejas de Mauricio que también fueron víctimas de violencia, se han acercado a Karen para brindarle su apoyo.