Se reunieron mujeres priistas en un tradicional café de la zona conurbada Veracruz -Boca del Río para maquinar cómo hacerle para obtener algún beneficio o cargo público en Morena pero nadie las pela debido a su pasado priísta.
Ellas fueron priistas en los tiempos de bonanza del partido tricolor, cuando fueron gobernadores Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa. A partir de la administración de este último vino la debacle del PRI y en cada elección el partido comenzó a perder votos hasta llegar a la elección del 2024 en la que Morena y los partidos aliados arrasaron en todo el Estado de Veracruz dejando a la oposición muy por debajo de las expectativas que tenían de obtener más diputaciones locales y federales así como senadurías.
Actualmente los priistas ya dejaron el partido tricolor desde hace algunos años en unos casos y otros dejaron las filas del tricolor este mismo año al no obtener ninguna candidatura en las recientes elecciones. Ni mucho menos una diputación plurinominal como estaba acostumbrada Anilu Ingram, quien obtuvo en dos periodos legislativos dos pluris, una federal y otra local.
Ahora como no le dieron nada en el PRI se le hizo fácil a Anilu refugiarse en Morena para ver qué le daban en las pasadas elecciones pero para su desgracia ya estaban repartidas todas las candidaturas pues dejó el PRI cuando ya estaba corriendo el proceso electoral.
Después de acompañar a un evento en el Monumento a la Revolución, en la ciudad de México a Xóchitl Gálvez y levantarle la mano, demostrando que apoyaba su candidatura, Anilu tuvo el descaro, semanas después, de reunirse con la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, a la que persiguió en todos lados donde se presentó en su gira por Veracruz un mes antes de las elecciones, llegando al grado de hostigarla por su insistencia de que Claudia la conociera y supiera quién era Anilu.
A partir de este 5 de noviembre, fecha en que entra la LXVII legislatura del Congreso del Estado Anilu se encuentra sin trabajo pues deja de ser diputada local. Ya está recorriendo las colonias del puerto de Veracruz tocando las puertas de los ciudadanos para hablar de los programas sociales impulsados por Morena. ¿Cómo si no hubiera suficientes delegados de Morena, diputados locales y federales, salientes y entrantes, que ya recorren las colonias haciendo lo mismo?
Anilu está consciente de que no será la candidata a la alcaldía de Veracruz, pero está haciendo méritos para que le dé trabajo la gobernadora electa. Su tirada es ser delegada de una dependencia federal. La Ingram tiró a la basura su gorra y playera del PRI y ahora anda por todos lados con su chaleco y gorra de Morena. Los ciudadanos no son tontos y saben quién es quien en la política, conocen la trayectoria de cada uno de los políticos que tocan su puerta y hacen reuniones en las colonias. Y saben quiénes son morenos fundadores y han apoyado a Andrés Manuel López Obrador desde que fue jefe de gobierno en la ciudad de México, desde que fue dirigente nacional del PRD.
Las mujeres que están en esa mesa del café de la parroquia no apoyaron a López Obrador en su primera campaña a la presidencia de la República en 2006. En aquella época apoyaron a otros candidatos, pero ahora todas y todos se quieren subir al barco de Morena pensando que cambiar de partido es algo tan sencillo como cambiarse de ropa. Fabiola, Maritza y Janet quisieran ser candidatas en las próximas elecciones pero tienen que conformarse con apoyar a los que llegan al poder pues su pasado las persigue, la gente sabe que son priistas y puede verlas como infiltradas