Leopoldo Tlaxalo
El presidente de la Asociación de Empresarios Transportistas del Estado de Veracruz, Víctor Manuel Castelán Crivelli aseguró que esperan que el gobierno estatal que encabeza Miguel Ángel Yunes Linares les dé el visto bueno del incremento a las tarifas del servicio de transporte público que quieren hacer pues el incremento de los combustibles ha mermado sus ganancias considerablemente y la situación se ha vuelto insostenible.
Los transportistas saben que con el aumento los únicos perjudicados serán los usuarios, pero parece no importarles, pues el empresario considera que ya es justo que haya un aumento a los precios pues desde el año pasado se registra una afectación a los transportistas por el incremento a los combustibles. Crivelli anunció que con el aumento la tarifa podría quedar en 10 o 11 pesos para el público en general y 8 o 9 para estudiantes, personas de la tercera edad y discapacitados.
“Nosotros traemos un desfase por cuestiones nada más del combustible de casi 4 pesos a partir del 1 de enero de 2017 y la paridad cambiaria que traemos en prácticamente un 22 por ciento. Los autobuses trabajan aproximadamente con 80 o 90 litros de combustible, 80 litros a 4 pesos traemos un desfase de 320 pesos diarios por autobús que se ha tenido que erogar de la utilidad”, expresó alarmado el transportista.
Sobre las pésimas condiciones en que se encuentran la mayoría de los autobuses del servicio de transporte público, Crivelli reconoció que efectivamente muchos de ellos están en malas condiciones pero no les pueden dar mantenimiento porque lo que ganan no les alcanza para hacerlo pues sus utilidades han sido muy bajas y ni hablar de comprar nuevas unidades.