Exhorta Hernández Espejo solución a problemas de trabajadores portuarios

La requisa de 1991 los dejó en la pobreza extrema *De 5 mil trabajadores solo quedan 869, el resto ha fallecido**Les quitaron sus derechos laborales, concesiones, prestaciones, cuentas bancarias e inmuebles

El sector obrero de la unión de Sindicatos de Maniobristas, Estibadores y Checadores del puerto de Veracruz se manifestaron esta mañana en los diversos edificios del Servicio de Administración Tributaria (SAT), con el objetivo de que le sean restituidos sus derechos luego de 31 años que les fueron arrebatados de manera arbitraria.

Rosa María Hernández Espejo, diputada federal por el Distrito 4 de Veracruz, se solidarizó con los trabajadores en su lucha durante el inicio de su manifestación pacífica, luego de que, en 1991, el entonces presidente de México Carlos Salinas de Gortari, y el ex gobernador Veracruz Dante Delgado Rannauro, ejecutaron la requisa del puerto que dejó en la indefensión a más de 5 mil trabajadores.

La legisladora dijo que apoyará desde la Cámara de Diputados las demandas de los quejosos con un exhorto en el pleno del Congreso de la Unión, luego de que en los procesos legislativos el tema no avanza, de tal manera que la diputada envió al presidente de la Mesa Directiva de la Cámara un documento para saber por qué la solicitud no avanza, a pesar de que el Ejecutivo Federal instó más de tres veces a la solución del problema.

Hernández Espejo indicó que será el 18 de agosto cuando sean recibidos en la cámara baja, donde esperan que se les tengan respuestas favorables a sus problemáticas, ya que al implementarse la requisa se les quitaron sus derechos laborales, cuentas bancarias, propiedades (ocho en total), concesiones y permisos; despojos que nunca les permitieron jubilarse.

Sentada entre los manifestantes, frente al Baluarte de Santiago, desde las 7 de la mañana de este martes, la legisladora indicó que en estas condiciones deplorables de 5 mil trabajadores sólo quedan vivos 869, el resto son adultos mayores que no tuvieron las condiciones que por ley les correspondían para sobrevivir luego de años de trabajo.

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