J.Velasco/Nacional Ciudad de México; 12/02/2020.- Esta mañana durante su conferencia mañanera, los periodistas cuestionaron al presidente Andrés Manuel López Obrador sobre la detención de “Emilio Lozoya Austin”, ex director de PEMEX.
El presidente evadió a la prensa y evitó dar declaraciones, pues al carecer de información podría caer en controversias. Y es que en efecto, la FGR confirmó la detención de Emilio Lozoya en Málaga España. La opinión pública felicitó en redes sociales al Fiscal General de la Nación Alejandro Gertz Manero por lograr la detención del representante y operador de la peor corrupción estructural del neoliberalismo.
El presidente expresó que mañana contando con más información, daría respuestas a todas las preguntas, y se despidió de la mañanera. Antes de despedirse recordó a todos los periodistas que cubren la fuente del presidente que hoy miércoles en la noche tendría una reunión con los 100 empresarios más importantes del país para ver lo de la venta de los boletos del Sorteo del Avión Presidencial; el cual será el próximo 15 de septiembre.
Sobre la detención de Emilio Lozoya, se sabe que este se encontraba en Alemania, y se comunicó con Enrique Peña Nieto para tratar de llegar a acuerdos con el Gobierno de México cuando fue detenido. Lozoya es acusado por recibir sobornos de Odebrecht, y Gertz Manero confirmó su detención.
El Fiscal General de la Nación expresó que ya se hizo la solicitud de extradición a España, pero que esto se llevará tiempo debido a los procedimientos que son normales en ambos países. Cabe recordar que a Lozoya, se le sigue un procedimiento de responsabilidades administrativas, luego de que se comprobó que Lozoya Austin, quien también es buscado por autoridades judiciales, proporcionó información falsa en su declaración de situación patrimonial, al haber omitido en más de una ocasión una cuenta bancaria que registraba saldos de cientos de miles de pesos. Ya están Juan Collado y Rosario Robles en la cárcel. El cerco se cierra en torno a Enrique Peña Nieto, fraudes tan grandes no pudieron cometerse sin el consentimiento de Enrique Peña Nieto