La activista jarocha quien pertenece al Observatorio Nacional de Crímenes de Odio, Jazziel Bustamante Hernández anunció que desde este jueves a las 19:00 horas se puso en huelga del hambre y la mantendrá hasta que la Fiscalía General del Estado de Veracruz y la Fiscalía General de la República se reúnan con los activistas y defensores de la comunidad LGBTTTI para determinar estrategias para acabar con los crímenes de odio.
Cada que asesinan a un miembro de la comunidad LGBTTTI, Jazz exige justicia a las autoridades pero desafortunadamente todos los crímenes quedan impunes. La activista lamentó que ante los 19 crímenes de odio que se han registrado en la entidad veracruzana durante este año, la Fiscalía General del Estado de Veracruz se ha mantenido estática, sin hacer nada para dar con los responsables de estos asesinatos. La Fiscalía General de la República también se mantiene omisa con el tema de los crímenes de odio.
En comparación con el año pasado, los crímenes de odio registran un aumento del 25% . Uno de los asesinatos que cimbró a la activista y defensora de derechos humanos de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual fue el de “Brandy” Ronzón Huerta, quien recibió más de 30 puñaladas y le desfiguraron el rostro.
No conformes con matarla a ella, también asesinaron a su madre. Los trágicos hechos se registraron en Puente Nacional, Veracruz. Bustamante lamentó que este viernes asesinaron a otra compañera suya en Tijuana.
Bustamante dijo que en varios Estados del país existen reformas a los códigos penales para sancionar con la causales agravantes este tipo de crímenes y desafortunadamente en el Estado de Veracruz persiste la impunidad pues no se han implementado los protocolos para clasificar las causales agravantes por identidad de género u orientación sexual.