Jocelyne, una joven de 20 años de edad, acudió el miércoles 28 de julio a un consultorio de farmacias del Ahorro ubicado en el boulevard Ruiz Cortínes del municipio de Boca del Río para hacerse la prueba de Covid-19 y el médico que le aplicó la prueba presuntamente intentó abusar de ella.
La joven acudió al consultorio acompañada de su mamá, quien la esperó en el estacionamiento. Por protocolo, la joven entró sola al consultorio del doctor, quien después de aplicarle la prueba le dijo que había salido negativa.
Todo iba bien hasta ese momento, pero lo primero que incomodó a Jocelyne fue que el doctor le preguntó si tenía novio.
Después, el individuo le dijo que tenía que revisarla, checó su garganta, pero después comenzó a tocarla. “La consulta se manejaba por fichas y yo era la número 15, a mis amigas que pasaron antes de mi les pregunté el proceso y en qué consistía, ellas me comentaron que les hicieron la prueba, que les pidieron sus datos y ya se iban, que era un máximo de cuatro minutos. Cuando me tocó el turno al principio fue todo normal, el doctor me hizo la prueba y en lo que esperamos los resultados me tomó mis datos, me pareció todo normal hasta que me preguntó que si tenía novio, yo me saqué de onda pero le dije que no y ya después me dijo que había salido negativa. Después él se paró de su escritorio y se acercó mucho a mí, me dijo que me pusiera cómoda en la camilla que me iba a revisar, se me hizo extraño, me pidió que abriera la boca para ver mi garganta y empezó a hacerme masaje, primero empezó en el cuello, en los brazos, la espalda, yo me apaniqué mucho, él siguió y empezó a acariciarme, me abrió las piernas y se metió, pude sentir su miembro”, aseguró Jocelyne.
El hombre estaba prácticamente encima de la joven, hasta que llegó la mamá de Jocelyne, quien le preguntó al doctor si todo estaba bien. El médico se asustó al ver a la mamá de la víctima.
Después de los hechos, la madre de la joven reportó al médico con la encargada de la farmacia y llamaron al 911 para solicitar ayuda. Hasta el lugar de los hechos, llegaron los padres del galeno con una placa de Derechos Humanos para interceder por el doctor de 33 años. El papá del doctor entraba y salía del consultorio, pero el médico no quería salir hasta que tuvo que hacerlo a las 8:00 de la noche del miércoles 28 de julio. Jesús Raymundo, nombre del médico, fue trasladado al penalito de Playa Linda.
La joven denunció al doctor ante las autoridades. Pide que le retiren su cédula profesional y que caiga todo el peso de la ley en su contra. Se desconoce si el galeno tiene antecedentes de otros casos en los que presuntamente haya intentado abusar de alguna otra joven.
El galeno busca llegar a una negociación con los padres de la joven para evitar ser procesado legalmente. Jocelyne y sus padres no quieren dinero, sólo que se haga justicia.